La Fiesta del San José Obrero, el 1 de mayo, será un día especial de oración en la Diócesis de Trenton. El obispo David M. O’Connell, C.M., ha anunciado una Misa dedicada a todos los trabajadores, seguida por un servicio de oración para consagrar de nuevo a los Estados Unidos a la Santa Madre.
Instituida en el 1955 por el papa Pio XII, la Fiesta de San José Obrero celebra la santidad de la labor humana y a San José, carpintero y padrastro de Jesús.
Durante la Misa del mediodía, el obispo O’Connell ofrecerá oraciones por las intenciones de todos los trabajadores – de los empleados, los desempleados, quienes buscan el empleo, e incluso para los retirados o jubilados.
La Misa estará transmitida en vivo son congragación desde la capilla de la Iglesia San José, Toms River. El obispo O’Connell será el celebrante principal y predicador. El padre Scott Shaffer, párroco de la Parroquia San José, concelebrará junto con otros sacerdotes parroquiales. Se podrá ver la Misa en los sitios diocesanos y las fuentes de redes sociales, incluyendo trentonmonitor.com y youtube.com/trentondiocese, y estarán disponibles para ver después de la Misa.
Luego en el mismo día, el obispo O’Connell se unirá a otros obispos de por los Estados Unidos y Canadá para consagrar de nuevo a los dos países a la protección de la Santa Madre bajo el título, “María, Madre de la Iglesia”. El obispo O’Connell dirigirá un servicio de oración a las 3pm desde la Iglesia María, Madre de la Iglesia, Bordentown, que también estará disponible en las fuentes digitales y sociales de la Diócesis.
Cada año, la Iglesia pide la intercesión especial de la Madre de Dios durante el mes de mayo. Este año, la Conferencia de Obispos Católicos de los EE. UU. y la conferencia episcopal canadiense decidieron re-consagrar sus países a María, Madre de la Iglesia, especialmente en medio de la pandemia actual.
El papa Sam Pablo VI le dio a la Santa Madre el titulo de “María, Madre de la Iglesia” durante el Segundo Concilio Vaticano. Añadieron un memorial bajo ese titulo al calendario litúrgico por el papa Francisco en el 2018 para que se la celebrara anualmente en el lunes después de Pentecostés.
Esta re-consagración reafirma las consagraciones previas de los obispos de los Estados Unidos a María. En el 1792, el primer obispo de los Estados Unidos, el obispo John Carroll, consagró el país a María bajo el titulo de la Inmaculada Concepción, y en el 1846, los obispos unánimemente escogieron a María bajo ese titulo como la patrona del país. En el 1959, el cardenal Patrick O’Boyle de Washington consagró los Estados Unidos otra vez al Corazón inmaculado de María. En ese año, terminaron con la construcción del Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción en Washington.
La reconsagración del 1 de mayo sigue el ejemplo de la conferencia latinoamericano de obispos que consagró Latinoamérica y el Caribe a Nuestra Señora de Guadalupe el Pascua.
Durante la crisis del COVID-19 y hasta mayor aviso, solo se puede distribuir la Santa Comunión a los fieles como Viaticum por los moribundos en la Diócesis de Trenton.